Se manifiesta por hormigueo, entumecimiento o dolor en los dedos, manos, muñecas, antebrazo, codo o brazos.
Si trabajas muchas horas con ordenador y notas alguno de estos síntomas puede que lo estés padeciendo.
Supone un 87,3% de las nuevas enfermedades profesionales y un 46% de las bajas laborales en Europa.
Se engloba dentro de las enfermedades musculo esqueléticas y está desencadenado por la ejecución prolongada de movimientos repetitivos que producen uno o más tipos de lesiones:
Tendinitis (inflamación del tendón), tenosinovitis (inflamación del revestimiento del tendón), epicondilitis (inflamación de los tendones en la unión con el codo), síndrome del túnel carpiano (compresión del nervio mediano dentro del túnel carpiano a la altura de la muñeca).
Estas lesiones son causadas por trabajar con ratones que obligan a una mala posición de la mano, muñeca y antebrazo, así como por las posiciones y movimientos inadecuados que realizamos durante horas mientras trabajamos con el ordenador.
Prevención: Algunas recomendaciones sencillas
Ejercicio de Extensión y Flexión de manos.
Con los brazos estirados al frente, dobla la mano hacia arriba apuntando con los dedos al techo (extensión), mantén esta posición unos 20 segundos y relaja. Después, dobla la mano hacia abajo apuntando con los dedos al suelo (flexión), mantén la posición unos 20 segundos y relaja.
Realiza 10 veces estos movimientos antes y después de tu trabajo con el ordenador.
Estiramiento del Túnel Carpiano.
Los ejercicios son los mismos que acabamos de citar, solo que esta vez te ayudarás con la otra mano para empujar los dedos y conseguir estirar el túnel carpal. Mantén ambas posiciones 20 segundos y relaja. Realiza el estiramiento con la fuerza suficiente para sentir cómo se estiran los tejidos de la muñeca, pero no fuerces más.
Elige bien el modelo de ratón
Que te permita el apoyo completo de la mano y los dedos y mantener el brazo y la mano alineados, evitando la flexión y la extensión de la muñeca.
Mejora tus posturas al utilizar el teclado o el mouse
Durante el trabajo coloca el antebrazo en un ángulo de 90º con el brazo, esto evitará la flexión de la muñeca y te permitirá mantener los hombros relajados.
Evita los movimientos laterales y la flexión y la extensión de la mano.